Tránsito Amaguaña (1909 – 2009)

“!Bonitico el gobierno, es la primera vez que se acuerda de mí!… Pero mi verdadero premio es el avance de mis hermanos, de mis hermanas, de todo mi pueblo”.

Transito Amaguaña, líder indígena Kayambi, nació el 19 de septiembre de 1909, en la comunidad Pesillo, parroquia Olmedo, cantón Cayambe; hija de mercedes Alba y Vicente Amaguaña; aprendió a leer y escribir durante los viajes que hizo a Cuba, porque aquí en el Ecuador la educación para los indígenas era prohibido.

Creció junto a sus padres quienes fueron trabajadores de hacienda, por lo que conoció la explotación a los indígenas huasipungueros. Se casó muy joven pero su matrimonio tuvo muy poco tiempo debido a que su esposo no participaba de la lucha indígena. Tuvo un hijo y trabajó como empleada doméstica.

Se relacionó con los incipientes movimientos indígenas y conoció a la dirigente Dolores Cacuango, decidiendo luchar junto a ella. Asistía a las reuniones del naciente partido comunista y participaba activamente en protestas.

Participó en la creación de los primeros sindicatos agrícolas del país, en la primera huelga de trabajadores agrícolas en Olmedo (1931). Cuando los sindicalistas y campesinos habían conseguido el primer Código de Trabajo y la Ley de Comunas, Fundó la Federación Ecuatoriana de Indios en 1944, junto a Nela Martínez, Jesús Gualavisí y Dolores Cacuango.

Por iniciativa propia y sin apoyo del gobierno, en 1945 inició las escuelas campesinas, fundando, en el área de Cayambe, cuatro escuelas bilingües (quichua-español).

Al regresar de la Unión Soviética, en 1963, fue detenida y llevada al Penal García Moreno, acusada de tráfico de armas soviéticas. Fue reprimida, perseguida y encarcelada por varios gobiernos.

Sus últimos años lo vivió en la comunidad de La Chimba, perteneciente a la parroquia Olmedo del cantón de Cayambe, en una humilde casa, en la misma que murió el día domingo 10 de mayo, en la tarde.

Su humildad y su vida de sacrificio son un verdadero ejemplo no solo para la comunidad indígena, sino para todo un país que muchas veces la dejó en olvido.

Poema.

El volcán Cayambe abre su vida a la magia, abre sus entrañas… que son blancas, llenas de canas como la historia, caliente y fría como la vida. La soledad también es parte de la vida, pero aquí no es tan sola, y el frío es parte de la llama que algún día fue. Aquí está ella como la soledad, como el propio fuego, frente a sus recuerdos, que son como la memoria de su gente.

 

Por: Kintto Lucas

Fuentes:

Entrevista a Tránsito Amaguaña

Mercedes Jiménez, La Mujer en la Historia del Ecuador, CECIM, Quito, 1998.

Martha Bulnes, Me levanto y digo, testimonio de tres mujeres quichua, Colección Ecuador/Testimonio (Quito: Editorial El Conejo, 1990), 31.

Kintto Lucas, corresponsal del Servicio Informativo Iberoamericano de la OEI

Andrea von Rauch  Estudiante Alemana de Intercambio

Servicio Informativo Iberoamericano Septiembre 1998

Diario El Norte 2006/03/11

Ecuarunari

Edufuturo